jueves, 15 de octubre de 2009

EL PADRINO Y SU VISION DEL MANAGEMENT
















Conozca los consejos de management ocultos en una de las mayores obras del cine mundial: El Padrino. 

La obra cinematográfica El Padrino no es en absoluto una película sobre la Mafia, más bien, se trata de una cinta sobre la inteligencia corporativa. En palabras de su propio director, Francis Ford Coppola, es "una metáfora sobre el capitalismo en América" y sobre las cuestiones del poder y la sucesión.

Don Vito Corleone, protagonista del film, se convirtió en un manager respetado empresarial y socialmente, con una importante capacidad de análisis estratégico del entorno, lo que resulta una excelente herramienta para aprender management.

Además de cumplir con las funciones propias de un directivo empresarial, Vito cumplía con ciertos rasgos especiales que le significaron el respeto de todo su mundo empresarial. Estos son:

Se Hace y Nace
Vito, pese a su pobre formación, es un buen manager con gran inteligencia emocional.

Persona ante Todo

Tenía claro que un directivo es una persona y una empresa es un grupo de personas. Hay personas que tienen objetivos claros en su vida y otras que no. Las primeras se valen de las segundas para conseguir lo que desean.

Sus Propios Códigos
Corleone tiene claro lo que desea. Se niega a aceptar los dictados de la sociedad americana de principios del siglo XX, porque su condición de inmigrante pobre le impide llegar a ser uno de los poderosos por la vía legal. Entonces, crea sus propias leyes y su propio código de valores.

Lealtad
Familiar y entrañable mantiene a sus socios de toda la vida con él, demostrando lealtad. Don Vito es reconocido y respetado como un benefactor de la comunidad, un hombre de honor. Atesora una red de contactos políticos y sociales de gran valor, creada mediante el mecenazgo y el dinero.

Inteligencia Emocional 
Don Vito tenía claros sus objetivos vitales y enseñaba autocontrol a sus hijos, generaba empatía, tenía una motivación clara (su familia moviendo los hilos en el mundo legal) y había tejido una importante y valiosa red de contactos.



“Si no puedes cambiar la dirección del aire, cambia la dirección de las velas”

Napoleon

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