PODEMOS EQUIVOCARNOS

Roberto Goizueta fue uno de los ejecutivos más exitosos de todos los tiempos, durante 16 años dirigió Coca-Cola, y en ese período de tiempo el valor de las acciones subió un 35 por ciento y las ventas pasaron de 6,000 millones a 19,000 millones de dólares. Sin embargo, durante su mandato también se cometió una de las decisiones más controvertidas de la multinacional de los refrescos: el lanzamiento de la Nueva Coca-Cola. Un proyecto que ha sido declarado como el más grande error de la empresa en toda su historia.

Para los que son más jóvenes que su servidor y no recuerdan el hecho, permítanme decirle que durante los primeros diez días después del lanzamiento de la Nueva Coca-Cola las ventas se desplomaron, y los embotelladores, el canal distribuidor y los clientes denunciaron que esto representaba una tremenda equivocación por todos los medios posibles: llamadas telefónicas, correos, faxes, etcétera, (recuerden que todavía no existía Internet). Por todo esto, Goizueta fue acusado de haber cometido la mayor equivocación de mercadeo de los tiempos modernos.

            Pero, ¿saben qué? Goizueta aprendió de su error y volvió a sacar la fórmula original nombrándola “Coca-Cola Classic”, y con esto, el mayor error de mercadotecnia se convirtió en el más grande triunfo. Todo esto lo pudo hacer por que reconoció abiertamente su error y actuó en consecuencia. Y este es un punto clave en el tema de los errores: el primer paso para aprender de los errores es reconocerlos, luego actuar. Y es que muchas más personas aprenderíamos de nuestros errores si no anduviéramos tan ocupados negando que los cometimos, justificándonos, y buscando otros culpables.

            Y es que la gran mayoría de las personas le tenemos tanto miedo al fracaso, es decir a los errores, que preferimos no tomar decisiones. Por esto siempre que me encuentro un grupo humano (empresa, organización, familia, etcétera) en donde no se toman decisiones, en donde la innovación ha desaparecido,  descubro que ahí se cobran caros los errores, se castiga a los que se equivocan de tal manera que sus miembros prefieren la pasividad antes que las fallas. Y lo peor es que al suprimir los errores se suprime también el aprendizaje. Sin errores no hay descubrimientos, no hay avances.

            A continuación les voy a compartir una serie de frases que representan equivocaciones de personas reconocidas en diversas disciplinas. El hecho de que hayan cometido un error al haber expresado estas frases viene a demostrar que todos estamos propensos a equivocarnos.

FRASES

"Creo que hay un mercado mundial de quizás unas cinco computadoras."

THOMAS WATSON, chairman de IBM, 1943.

"He viajado por este país de arriba a abajo, hablado con los ejecutivos más importantes y con los mejores técnicos, y les puedo asegurar que el proceso automático de datos es una chapuza que no va a durar mas de un año."
El editor de libros sobre negocios de Prentice Hall, 1957.

"¿Pero... para que nos van a servir?"
Ingeniero de la Advanced Computing Systems Division de IBM, 1968, hablando de los microchips.

"No existe una sola razón por la cual alguien quisiera tener un ordenador en su casa."
KEN OLSON, Presidente, chairman y fundador de Digital. Equipment Corp.1977.

"Este aparato llamado teléfono tiene demasiados problemas para ser seriamente considerado como un medio de comunicación. El aparato no tiene ningún valor inherente para nosotros." Memo interno de la empresa Western Union, 1876.

"La caja musical sin cables no tiene ningún tipo de valor comercial.
¿Quién iba a pagar por un mensaje que no esta siendo mandado a nadie en particular?"
David Sarnoff's Associates en respuesta a la propuesta de invertir en la radio, durante la década de los años 20.

"640K (de memoria) debería ser suficiente para cualquiera."

BILL GATES, 1981

MALAS DECISIONES

 Un día una persona se acercó a un prominente empresario y le pregunta ¿Qué se requiere para tener éxito en los negocios? Y  él hombre de negocios responde: La clave para alcanzar el éxito está en las buenas decisiones. Luego le pregunta al empresario, ¿Qué se requiere para tomar buenas decisiones? A lo que responde: Para tomar buenas decisiones se requiere experiencia. Y la siguiente pregunta no tarda en llegar ¿Y que se requiere para obtener experiencia? La experiencia se obtiene tomando malas decisiones y aprendiendo de ellas.

             Todos podemos equivocarnos, mientras lo reconozcamos de forma rápida, aprendamos, y actuemos para corregir inmediatamente. Si no tenemos la humildad para hacer esto, ni nos apuremos: ni vamos a aprender, y mucho menos corregir nuestros errores.

 "Si no te equivocas de vez en cuando, quiere decir que no estas aprovechando todas tus oportunidades".

 Woody Allen